Una de las preocupaciones más frecuentes que escucho en la consulta tanto antes como después de la cirugía es sobre las temidas "orejas de perro" las cuales no son más que piel sobrante en ambos extremos de la cicatriz después de una Abdominoplastia.
Y las cuales son más factibles de aparecer cuando se tiene mucha piel sobrante.
Cabe mencionar que el proceso de cicatrización y evolución es único en cada paciente y es completamente normal encontrarse con dichos hallazgos en la evolución post-quirúrgica de un procedimiento que más que estético es re-constructivo.
¿Son las orejas de perro un resultado no deseado ó sinónimo de un procedimiento mal realizado?
No. Recordemos que la Abdominoplastia tiene como principal objetivo eliminar la piel sobrante causada generalmente por una perdida de peso excesiva y brindarle al paciente la posibilidad de retomar ciertas actividad como por ejemplo ponerse un bikini con confianza y comodidad.
Y ¿como se logra esto?
Dejando un vientre plano y una cicatriz bonita.
Lo cual seria casi que imposible si se decide corregir ese detalle en quirófano al momento de la realización de la Abdominoplastia. Ya que para esto seria necesario extender la longitud de la cicatriz, muchas veces llegando incluso hasta la espalda. Realizando un corte más grande. Lo cual puede traer complicaciones.
Lo más sabio es cortar menos piel para así proteger tus tejidos y evitar los problemas que se pueden generar tras el corte excesivo de piel, como por ejemplo una necrosis.
¿Como se corrigen?
Con una breve intervención, realizada con anestesia local. En donde se corta solo lo que realmente sobra.
Se debe de tener en cuenta que la resección de las orejas de perro y cualquier otro retoque depende de la variabilidad genética, entendiendo que todos los pacientes son diferentes, y se debe de evaluar aproximadamente al 6 mes que es cuando se ha disminuido casi toda la inflamación post-quirúrgica y entra el paciente en la etapa de verdadera recuperación. Por ende la programación de dichas correcciones estéticas se debe realizar a partir del octavo mes después de la cirugía.
*Existen pacientes con procesos fibroticos tan complejos que los retoques son programados incluso un año después de haber realizado la cirugía.
Es muy importante confiar en tu cirujano, el es el único con la capacidad de decidir por donde y hasta donde cortar, ya que el es quien conoce tus tejidos y la elasticidad de tu piel. Un buen cirujano siempre optara por la decision que más te favorezca y en el caso de una cirugía como la Abdominoplastia lo más importante es preservar tus tejidos.